Yo vivo, muero y recuerdo
por que el alma me lo condena y la cotidianidad me aburre.
Cuando caigo en cuenta que aun puedo oír el latido de tu corazón,
me aseguro que el amor aveces se equivoca de persona.
Y aunque me duele respirar
tengo fe en lo que no veo,
amo lo que no tengo,rió de lo que no es gracioso,
mientras aya tantas canciones para dedicar, y nadie a quien hacerlo seguiré vomitando lo delicioso.
De hay que las sobras se las comen los perros y mis palabras tienen poco valor,
escribir es la mejor manera de hablar,
con Don Quijote y Dulcinea noche a noche inspirándome ,siento que todo lo suyo fue papel, que destruido quedo tras mojarse con la lluvia,
cuando por obvias razones la mente me a desvariado y me vienen imágenes y palabras que no es conveniente recordar.
Mi mente no se decide,
por que a veces siento que mi memoria se va calcinando, sera verdad¿?
Y en esos momentos no hace falta afirmar que aun vives aquí.
Curioso es cuando por mas que quiera recordar tu rostro se me es imposible,
mas aun cuando nadie puede obligar a nadie a hacer algo que no quiere,
o a exigir sus necesidades.
E de maldecir cuando frecuentemente te presentas en todos mis sueños.
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