El martes 15 de febrero fue el último día que estuve con él, fue la fecha de nuestro último beso, de nuestro último abrazo, de nuestro último Te amo, no lo sabía.
Perder a un ser querido es algo muy lamentable, porque no le ponemos el mismo sentido de cariño cuando estamos con ellos, que cuando ya no están, ese sentimiento se vuelve tan intenso , tan desgarrador, tan doloroso, que con solo pronunciar su nombre posa lagrimas en los ojos de quien lo dice, eso me paso a mí, ese chico de quien ya les había hablo y a quien extraño sin lugar a duda fue atropellado por un auto mientras se dirigía a su trabajo, era joven, era mi amor, era mi novio, escribir estas palabras hace que ardan mis dedos al tocar el teclado de este ordenador, no sabría como expresarles a ustedes lectores como me sentí cuando recibí la notica, por el simple hecho de que yo lo amaba y ustedes no.
No sé qué fue lo que sucedió, pero si sentí como una gran parte de mi vida se iba desvaneciendo junto con su cuerpo, no estaba en el lugar de los hechos, pero mi alma lo sintió como si fuera ella misma la que moría en ese momento, hace tiempo leí un mito griego, donde decían que el ser humano no está destinado a ser completamente feliz, hasta el día de su muerte fue que comprendí esa frase , yo era feliz y me sentía plena a su lado, hubiera preferido haber tenido algo de tristeza o enojo, o algún sentimiento qué impidiera que fuera completamente feliz para así no haberlo perdido,
“Uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde” Como me duele esa frase en este momento , como me pesa y me desanima en estos mismo instantes, esa sensación de que algo te falta esta las 24 horas del día, sea que este en el banco, en mi casa, en el parque o en el supermercado hay esta, hay veces donde mi mente me juega pasadas sucias y lo escucho reír, o lo veo llegar por la puerta de la casa como diciendo aun estoy aquí, todo estará bien . Pero razono y caigo en cuenta que solo es una ilusión algo creado por mi imaginación y la acumulación de recuerdos furtivos que aun tengo presentes, estamos a miércoles 27 de julio y aun lo logro sentir, no he superado su muerte, estos meses han sido los peores, no sé si me estoy volviendo loca, porque de día y de noche desvarió , se me fue el amor de mi vida, se me fue mi vida y este cuerpo quedo aquí sin una razón, sin un propósito, sin algo en que enfocarse, sin algo en que aferrarse solo quedo materia y un corazón que no tiene ganas de latir ni de seguir viviendo, necesito un escape o una salida de este cuerpo inerte que vive por osmosis y sumisión del destino.
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